El final del verano, la tarde del domingo … la vuelta al trabajo, en definitiva, son momentos que marca un antes y un después para muchos: el descanso que llega a su fin y los problemas que vuelven a estar ahí. Sin embargo, si el entorno laboral es agradable, tranquilo, acogedor e invita a levantar el estado de ánimo, todo puede ser más fácil. La iluminación, como tantas otras veces, desempeña un papel de primer orden en la creación de un ambiente agradable en la oficina.
Lámparas Oliva, a través de su división Proyecta, ha desarrollado numerosos entornos profesionales, desde los más vanguardistas a los más clásicos, pero todos ellos caracterizados por una iluminación clara, bien repartida y equilibrada, ajustada siempre a los requerimientos específicos de cada rincón de la oficina. Las salas de reuniones son las grandes estrellas de sus proyectos. En las zonas de trabajo común se imponen los espacios diáfanos con luminarias potentes –focos, halógenos, luces dirigidas a puntos concretos- pero nunca molestas, sino bien estudiadas y distribuidas. Dan ganas de que llegue el lunes …
1 comentario:
Trabajé durante un par de años en un semisótano. Sólo se veía un rectángulo de ladrillo del edifico de enfrente y, encima, la iluminación dejaba mucho que desear. Al final de la jornada, salir de allí era como volver a vivir. Esto para decir lo pertinente que me parece vuestro artículo y lo importante que sería que todas las empresas se tomaran el serio lo de la iluminación... al final si el empleado está a gusto se rinde más con lo que los beneficios son totales.
Publicar un comentario