viernes, 9 de enero de 2009

Estos días oscuros...


A la vuelta al trabajo, a los kilos de más que nos ha dejado la Navidad y a la cuesta de enero se une que todavía estamos en los días más oscuros y más fríos del invierno. Una combinación perfecta para no querer salir en todo el día de debajo del edredón. ¿Qué tal un poco de luz para animar el ambiente? Si miras a tu alrededor y los rincones oscuros de tu casa te bajan el ánimo, a lo mejor ha llegado el momento de encender la chispa. No es broma, la forma en que se ilumine un espacio donde se trabaja o se vive afecta al humor y a la felicidad. De hecho, el conocido como "trastorno afectivo estacional" es una forma de depresión que sufren algunas personas que son privadas de la luz del día. Si este es tu caso o si, sin llegar a tanto, los días grises y los anocheceres tempranos te dejan la moral por los suelos la solución está en recordar que la luz diurna es un componente importante de tu subconsciente y, en consecuencia, debes tomar medidas para proporcionar dicha luz diurna, o simularla, especialmente en las zonas de trabajo, que es donde no se permite el aletargamiento. Así pués, presta atención al brillo y al color de las superficies interiores que servirán para reflejar la luz y opta por puntos de luz fluorescentes que difunden una iluminación homogénea.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola,

Me ha encantado vuestro artículo, hasta dan ganas de volver a la rutina. SIn duda, la luz es parte esencial de nosotros mismos y condiciona nuestro estado de ánimo, no hay más que ver lo cabizbajos que andamos con estos días oscuros y lluviosos.

Iria

Anónimo dijo...

Es cierto. ¿Sabías que en los países nórdicos ponen halógenos en las ventanas para dar ilusión de luz natural y evitar depresiones?