Las grandes posibilidades de los apliques

Los infinitos matices de la iluminación se consiguen con un buen diseño de los puntos de luz ocultos o semiocultos. Sí, esos apliques casi "escondidos" en techos y paredes son los artífices de que nuestra mirada se dirija inconscientemente a aquellos lugares que aparecen destacados por ellos. La sutileza es el adjetivo que mejor define este juego de luces y sombras con el que lograr los efectos más sorprendentes.
Los apliques de luz se utilizan tanto en interiores como en exteriores. Dentro de esto último, las noches de verano se ven sin ninguna duda trasformadas por las piscinas iluminadas y los spas con encanto. Y, en lo que se refiere a los interiores, los puntos de luz son perfectos para rincones íntimos, como bibliotecas, pero también para dormitorios y salones abiertos en los que la luz natural encuentra su justo contraste con los puntos del luz artificial del interior.
Prueba sin miedo y verás el resultado, las opciones se cuenta por centenas, como muestra el nuevo catálogo de Metarlac ya presente en Lámparas Oliva.